Dios quien es todo Poder, toda Sabiduría y todo Amor, toda Misericordia y toda Dicha, reside en todos ustedes. Y también residen en ustedes todos los aspectos aparentemente opuestos de estas cualidades infinitas como desamparo, ignorancia, lujuria, crueldad, sufrimiento y así sucesivamente. Aquél que desea a Dios desarrolla compasión, desinterés y renunciación, basadas en la negación de sí mismo. Aquél que corre detrás de sombras transitorias, objetos del deseo, cultiva el egoísmo, la codicia y el odio. El primero trae paz sobre la tierra; el segundo trae guerra y destrucción. Renuncia a los bajos deseos y a las ansias innecesarias y experimentarás el cielo en la tierra.
Baba quiere que todos sus amantes sepan que es muy importante no sucumbir a la lujuria. Las tentaciones son y serán grandes, pero tu amor por Él debería ser más grande. Recuérdalo de todo corazón y levántate rápidamente desde donde has caído y sigue adelante en Su amor y servicio.