Después Ramjoo leyó en voz alta este mensaje preparado por Baba, cuyo título es “Perder el ego es ganar la libertad”:

Dios manifiesta Su presencia cuando y donde están totalmente ausentes la lujuria, la codicia, la ira, los celos, el odio, la maledicencia y los deseos egoístas. Pero como éstos son consecuencia de las “impresiones” (sanskaras) de vidas pasadas y deben necesariamente expresarse, corrientemente es imposible librarse de ellas; eso sería como tratar de que una roca se levantara sola.

No obstante, a las impresiones pasadas se las debe expresar para librarse de ellas. Pero al mismo tiempo que estas impresiones pasadas se expresan y gastan, se están forjando otras nuevas debido a que el ego inferior está presente y se hace valer. Este ego inferior, que se hace valer, debe ser abolido si hemos de librarnos de la interminable cadena de impresiones pasadas y presentes.

Solamente cuando nuestro ego inferior, que se hace valer, es eliminado, las impresiones pueden gastarse automáticamente sin recaer en las ataduras de nuevos sanskaras. Sólo quien ha logrado esto no podrá ser atado jamás por sus acciones buenas o malas, y dejará de ser responsable de ellas; estas acciones expresan nuestras pasadas impresiones que son producto de la virtud, la paciencia, la lujuria, la ira, la codicia, etcétera. De esta manera, con el cese de nuevos sanskaras, todas las impresiones del pasado se desenroscan naturalmente hasta terminar, y quedamos libres de todas ellas.

— Bhau Kalchuri, Lord Meher XII.