Después de asignar estas tareas, Baba dictó el siguiente discurso sobre el Conocimiento (Dnyan):
El Conocimiento (Dnyan) es algo muy difícil de alcanzar incluso después de un sinfín de formas evolutivas. Sin embargo se lo puede obtener en una fracción de segundo; esto es Conocimiento.
La imaginación es tan fuerte y su alcance tan infinito que ustedes pueden imaginar cualquier cosa. Pueden imaginar una rata con un millón de cabezas. Uno puede imaginar que es rey. El universo es la consecuencia de la imaginación. Pero al final hay un obstáculo. La imaginación no puede llegar a la eternidad. El tiempo está fuera de lugar en la eternidad. ¿Cómo podrá el tiempo limitar lo que no tiene principio ni fin?
¿Qué había en el principio? Pero cuando no hay principio, ¿cómo podrá haber un principio? Por más imaginación que se tenga no se puede pensar en lo infinito. Este Conocimiento llega en un segundo, aunque también después de un número infinito de formas no se lo puede obtener. Cuando llega, lo hace en un segundo.
¿Qué es el Conocimiento? El Vedanta, que no puede llegar a él, lo explica. Podemos comparar a Dios con un océano ilimitado y sin orillas. Todos nosotros somos gotas en ese océano. Podemos imaginar las gotas y el océano, pero no podemos imaginar a Dnyan. ¿Qué es eso que no podemos imaginar? Es una Cosa en la que no hay principio ni fin. Esto es Dnyan. Lo único que no podemos imaginar es lo que está más allá del principio y lo que está más allá del fin. Nadie es capaz de comprender esto. Hasta los rishis y munis se desconciertan.
Hafiz dice:
“La red de la imaginación
jamás podrá atrapar al halcón del Conocimiento.
Por eso, pliega tu red,
pues nada podrás atrapar en ella, salvo el vacío.”
Solamente los Sadgurus son capaces de dar este conocimiento en una fracción de segundo. Si consideramos lo que Hafiz ha dicho, llegamos a la conclusión de que, por más profundamente que pensemos acerca de lo que es el principio sin principio, somos incapaces de captarlo y explicarlo.
En el principio existía Dios, y antes de Dios existía Dios; ¡y antes de Dios existía Dios! ¿Qué hay al final? Dios. ¿Y después de eso? Dios.
Esto no se puede explicar por medio del intelecto porque allí la imaginación se desconcierta, y la mente y el intelecto nada pueden hacer. La mente es fuerte cuando imagina, y todo el mundo es creado y conducido mediante lo que la mente imagina. ¡Pero Dnyan existe donde se obstruye lo que la mente imagina. Y para que la imaginación funcione, debe funcionar la mente, pero debe conservarse la consciencia. Entonces, ¿dónde está Dnyan? Dnyan está donde termina la fuerza de la imaginación. Lo podemos llamar “swayambhu”: automático. Proviene deliberadamente de Dios. El Conocimiento de Dios significa Poder, Dicha, Belleza y Todas las Cosas. Entonces, instantáneamente, todo es absolutamente claro en un abrir y cerrar de ojos.
¿Qué es tu propio swayambhu dnyan (conocimiento automático)? Consiste en que sabes que eres un ser humano. Este conocimiento no es intelectual. Sabes que eres hombre. Sin embargo, no piensas en eso ni lo pones en duda. Una mujer sabe que es mujer. Esto es, se conoce como femenina. A este conocimiento se lo puede denominar swayambhu.
De igual manera, hay Swayambhu Divino. Este Conocimiento es Conocimiento Real. Quien tiene este Conocimiento no sólo se ve en todas las cosas y en todo lugar, sino que también vive la vida misma de Dios. Este Conocimiento no puede siquiera lograrse practicando sadhana durante millones de años y vidas sin la ayuda de un Sadguru. La Unión no es posible sin contacto con un Sadguru, pero también este contacto es posible en muy contados casos. Sin embargo, nuevamente, esto es Unión pero no Dnyan.
Dios solo es real. Todo lo demás está en Dios. Somos uno solo con Él, pero debido a la ignorancia, experimentamos la separación. Pero, a su vez, esta separación es necesaria para realizar nuestra Unidad con Él. Ahora bien, debido a que ya somos uno solo con este Conocimiento (Swayambhu), Dios no nos lo puede dar. Una vez que individualizamos y logramos este Conocimiento de Dios, que se llama Swayambhu, podemos impartir ese Conocimiento a cualquier persona. Dnyan ya está allí en todos, ¿pero ¿quién ha de darlo? Por esa razón, es necesario un Sadguru. Pero un Sadguru no se lo podrá dar a cualquiera. No podrá dárselo a quien no se aniquiló por completo. Se lo da a quien se entregó en un ciento por ciento, o a quien tiene una conexión muy cercana o profunda con él. Los Sadgurus son capaces de dar este Conocimiento en un segundo. Pero quien quiera este Conocimiento deberá tener la preparación necesaria. Tan sólo entonces el Sadguru da su ayuda. Él no da este Conocimiento a quienes no están preparados, pues en el caso de estas personas, eso sería como arrojar perlas a los cerdos. Esa ha sido la ley.
En resumen, Dnyan es lo que ustedes no pueden imaginar, y lo que tampoco los rishis y munis pueden imaginar. Cuando no logramos comprender el Conocimiento (Swayambhu) Divino, ¿cómo podremos comprender al Ser Único que posee ese Conocimiento? Pero cuando ustedes se ponen en contacto con un Dnyani que se los empieza a explicar, eso significa que ustedes se encaminan hacia Dnyan. Al Conocimiento no se lo puede imaginar; ¿entonces qué ocurre con el Dnyani (con quien posee el Conocimiento)? Cuando los rishis no son capaces de imaginar Vidnyanavestha (el Conocimiento Divino), ¿entonces qué es lo que ellos pueden imaginar acerca del estado de un Dnyani?
Los walis (santos) pueden dar la sombra del Conocimiento, con un toque o una mirada, o poniendo su mano sobre la cabeza de alguien que les gusta. ¿Por qué ponen su mano sobre la cabeza? Porque la cabeza es la sede del Conocimiento. Entonces si mediante su tawajjuh (poder o fuerza espiritual) los walis ponen sus manos sobre las cabezas de algunas personas, éstas reciben la sombra (del Conocimiento). Incluso en ese caso, se pierde la consciencia corporal. Pero esto no es Dnyan. En el Dnyanehwari está escrito que este Dnyan no se puede obtener, salvo con la intervención de un Sadguru.
Esto es todo, pues, acerca de Dnyan. En lo que a mí concierne, creo que el amor a Dios es la mejor avenida hacia el Conocimiento Real, pues Dios solo es digno de amar.
Tras completar este discurso por la mañana, Baba concluyó con los siguientes comentarios:
Dnyan llega siempre inadvertidamente. ¡Dios es tan bondadoso que es imposible imaginar Su ilimitada bondad! Algunos creen que sufrieron mucho, y que Dios aún no está derramando Su gracia sobre ellos. Pero concretamente, les falta la necesaria preparación. Hafiz dijo:
“Una punta de la hebra de un cabello está en mi mano,
y la otra punta en la mano del Amigo.
Nuestro tira y afloja ha proseguido durante años.”
Pero cuando llega la hora señalada y existe la necesaria preparación, entonces viene Dnyan, independientemente de lo que el individuo esté haciendo en ese momento.
— Bhau Kalchuri, Lord Meher XI.